El paraíso lo prefiero por el clima; el infierno por la compañía» Mark Twain»
La soledad no empieza cuando ella se va,
la soledad comienza cuando sin ella
tú tampoco te encuentras.
¿ A partir de qué altura el cielo es cielo?
Sería muy bueno saber ciertas cosas
antes de aprender a volar.
O por ejemplo,
¿ En qué beso el amor se convierte en cariño?
Te dirán que uno más uno son dos (y no siempre)
que Roma es la capital de Italia,
que debes estudiar mucho
para estar en el paro con cierta decencia.
Ignoran que cuando ella se va,
la única suma que te importa
son las de sus lunares en la piel,
que Roma sin sus labios también es un suburbio
y que la decencia solo sirve
para que te la perviertan con morbo.
Que en el amor se miente por amor,
de eso tampoco te avisará nadie,
aunque seguramente ni siquiera lo sepan.
Y cuando se dan cuenta ya es tarde.
Casi siempre es tarde.
La única vez que llegué pronto a un sitio
ella lo llamó casualidad.
Era el amor, el sitio me refiero.
Aunque sinceramente no lo diferencié tanto
de un simple banco de parque.
Nunca deberías fiarte de quien llama casualidad al amor,
seguramente lo llevaba buscando toda la vida.
Llegué pronto, tanto,
que ni siquiera había abierto del todo.
A lo mejor me equivoco pero yo creo que el amor
es como las puertas giratorias de los hoteles
si te despistas un poco acabas justo donde empezaste.
Y aquí estoy, de hecho,
con las alas rotas
y con unas ganas absurdas de saber
si el cielo, el de verdad,
se puede tocar simplemente alargando la mano.
Autor: Ernesto Pérez Vallejo
HERMOSO POEMA DE UN EXTRAORDINARIO POETA ,QUE HACE MAGIA CON LAS PALABRAS Y TE DEJA CREYENDO QUE NUNCA ENTENDISTE EL AMOR ,EL SEXO ,LA ANGUSTIA Y EL DESAMPARO DE LA PERDIDA HASTA QUE ÉL TE LO CUENTA EN UN VERSO .
Como siempre, brillante.
excelente como todo lo que escribe.
no se que decir.., quizá, solo que él -es cada día mas brillante, que el cielo es su alrrededor seguramente ..
¿A partir de qué altura el cielo es cielo?
Cuando la línea del horizonte se curva. Ahí me elevas cada vez que te leo, poeta.
Sigue así. Vas a volar muy alto, lo sé.
y…brindo por vos cada vez que tomo una cerveza!! Brindo mucho!!! salud y felicitaciones
Muchas Gracias a todos-as por venir a leerme aquí a Pandora, por la generosidad de vuestros comentarios que alargan las ganas de escribir y dar un pasito más cada vez más lejos, aunque sea de mi mismo, lo cual es todo un logro.
Me llevo algún comentario tatuado por aquello de la memoria selectiva y mi ego, salud-os.
No sé qué tienes, pero lo tienes. Y estremeces. En cada texto de una forma única.
Un descubrimientooo! Acabo de hacer un descubrimiento. En este siglo en que ya todo parece descubierto y así, a lo tonto, saltando de una cosa a otra, atraída por un título con mucho gancho, doy -a golpe de ratón- con un poema brillante, de sensibilidad exquisita y con la magia de un espejo en el cual veo el reflejo de sentimientos ya experimentados.
Usaré ahora mismo mi ratón para buscar y, creo que gozar, lo que su autor haya publicado y/o vaya a publicar. Así es como se gana la fidelidad de un lector: enganchándole a la belleza de unas palabras tan bien dispuestas.
Muchas Gracias Marcela, siempre tan amable.
Angélica, ya solo con tu mensaje me vale escribir en Pandora Magazine, muchísimas gracias.
He vuelto a releer algunos de los artículos de pandora-magazine y a descubrir otros que se me habían pasado por alto.
En estos versos he encontrado un poco del alma de quien los escribió. Y es que mostrarse así ante los demás es un acto de generosidad que hace extremecer el propio alma y llega a crear un vínculo entre ámbas que egoístamente necesita seguir nutriéndose con más sentimientos.
Ernesto, por favor, sigue escribiendo.