Adéntrate en el mundo de la Ouija

Existe el destino, la fatalidad y el azar; lo imprevisible y por otro lado lo que ya está determinado. Entonces, como hay azar y como hay destino, filosofemos (Séneca)   La […]
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Existe el destino, la fatalidad y el azar; lo imprevisible y por otro lado lo que ya está determinado. Entonces, como hay azar y como hay destino, filosofemos (Séneca)

 

La Ouija es un tablero en el que se encuentran grabados letras y números del 0 a 9 y todos los caracteres del alfabeto y en un lugar preferencial el  y el no, con el que supuestamente se puede entablar contacto con los espíritus; como guía se utiliza una tablilla acabada en punta, o cualquier artefacto que pueda cumplir la función de señalar. El funcionamiento consiste en poner las manos sobre la plataforma que se desplaza lentamente sobre el tablero, movida por una fuerza misteriosa. Los participantes esperan respuesta a las preguntas formuladas uniendo las letras sobre las que se mueve la plataforma.

Tiene un origen impreciso, pero se cree que fue a finales del siglo XIX, se patentó el 28 de mayo de 1890 por Elijah J.Bond como inventor y titulares a William H. A. Maupi y Charles W.Kennard. Lo que no se sabe con certeza es si realmente la inventaron o simplemente la patentaron. En todo caso, Kennar creó la empresa para la fabricación del tablero y comenzó a vender los primeros ejemplares en 1890. Kennard puso el nombre de Ouija, diciendo que era una palabra egipcia que significaba “mala suerte” (lo cual es incierto) Posteriormente se vendió la patente a William Fuld, antiguo empleado de Kennard, cuya compañía comercializó el “juguete” hasta que Parker Brothers adquirió los derechos en 1966. Fue William Fuld quien afirmó que la palabra Ouija era una mezcla de los vocablos oui y ja (que significan  en francés y alemán respectivamente). Lo que ha demostrado que su origen no era egipcio.

La Ouija tiene como objetivo el contacto de las personas que participan en el juego con supuestos espíritus y algunos dicen que contactan con demonios o con extraterrestres.

La postura católica es que más allá de los efectos peligrosos de ésta y otras prácticas (espiritismo, adivinación, hechicería) son contrarias al respeto a Dios, porque “encierran una voluntad de poder sobre el tiempo, la historia y finalmente, los hombres, a la vez que un deseo de granjearse la protección de poderes ocultos” (Catecismo de la Iglesia Católica, 2116).

Somos muchos los que nos adentramos en este “enigmático” mundo de la guija, unos para jugar y pasar el rato con los amigos, otros para probar, para buscar respuestas, para ponerse en contacto con algún espíritu y hay quien ve una posibilidad de decir o de que le digan lo que quedó sin cerrar o sin decir a algún ser querido que ya se fue; pero para poder hacer o realizar una sesión con la Ouija se necesitan un mínimo de conocimientos ya que puede llegar a ser muy peligroso si la sesión no está orientada por un experto conocedor de la materia y sobre todo que calme los nervios y la excitación de los allí presentes.

Una sesión de Ouija se practica en lugares muy tranquilos, alrededor de una mesa y tiene que haber un mínimo de cuatro participantes, pero puede haber tantos como se quieran, aunque a más participantes mayor descontrol. Es por lo que se aconseja sesiones de pocos participantes, aunque puede también haber observadores.  Se elige una habitación tranquila, pero hay quien recurre al “morbo” y la practican en lugares abandonados, cementerios y otros tétricos ambientes para crear ambiente.

Todos los participantes deben de ir a estas sesiones con confianza, sin miedo y sobre todo no tomárselo como un juego.

Hay gustos para todo: se purifica el ambiente quemando incienso, plantas aromáticas, se ponen velas para apagar la luz, y ya comienza la sesión. Uno de los participantes es el que va a llevar la voz cantante, es el que va a actuar de médium. Cerraremos los ojos y el médium nos pedirá relajarnos a todos. Acto seguido, preguntará «¿hay alguien ahí?». Después de algunos intentos (a veces en el primero) la tablilla se moverá señalando la palabra  y es cuando cada uno de los participantes pueden comenzar a preguntar a la “entidad” que está con nosotros.

Hay algunos consejos prácticos para los que se inician en la Ouija:

  • Siempre realizar la Ouija con una persona conocedora  o experta
  • Nunca practicarla con menores de edad
  • Estar tranquilos y relajados
  • No dejarse llevar por los mensajes ya que recordemos que esto debería ser un juego.

Creer en los mensajes recibidos a través de la Ouija es cuestión de fe, aunque los que hemos estado en una sesión de Ouija parece que la entidad que nos viene nos conoce bastante bien, que conoce nuestros secretos, vivencias, nos da mensajes para personas que una vez que nos ponemos en contacto con ellas (siendo para nosotros totalmente desconocidas) vemos que eran mensajes reales y para las personas que los reciben eran importantes y amortiguan en muchos casos el dolor de la pérdida de ese ser querido.

Hay otras personas que la entidad contactada es en realidad la energía de uno de los participantes de la sesión; lo que hay que tener claro es que nunca lo podemos tomar a broma. Aunque se asista como un “juego” siempre hay que tener una cierta dosis de miedo o temor ante algo desconocido y ante algo que no se sabe qué hay de cierto de cierto.

Os voy a relatar algún “caso real” contado por los participantes en alguna sesión de Ouija (Taringa.net):

 

Valencia, 25/10/2007

Un diario publicó una nota acerca de unos cinco chicos valencianos que se reunieron en una casa abandonada con la finalidad de practicar sesiones espiritistas por medio de una tabla Ouija. Prepararon un altar y comenzaron con el juego de la mano de uno de los chicos que hacía de portavoz en el juego. La primera pregunta que realizó fue “si la presencia de alguno de nosotros te molesta, dinos quién es y se marchará”. Enseguida el puntero de la tabla marcó tres nombres, quienes mirándose sorprendidos decidieron marcharse enseguida de la sesión. Después de haber caminado unos escasos 100 metros lejos de la casa, los chicos sintieron un ruido realmente estruendoso y cuando se volvieron a mirar que había pasado, vieron como la casa abandonada se derrumbaba sobre los dos chicos que se habían quedado jugando con la Ouija.

Caracas, 30/1/2006

Otra de las historias más conocidas por los expertos sobre el mundo paranormal, es la de Andrea, una chica venezolana que perdió a su madre a los 15 años de edad. Tres años después junto con unas amigas decidieron comenzar a jugar a la Ouija como una simple diversión y comenzaron la sesión realizando la típica pregunta “si se trataba de un espíritu bueno o malo” y la entidad comenzó a deletrear el nombre de Andrea reiteradas veces, junto con fechas que eran muy significativas para su familia.

Presenciando esto Andrea, decidió sacar el dedo cortando la conexión que se había establecido, lo que provocó la ira del espíritu atacando a sus amigas, pero sin tocarla a ella. Después de unos 20 minutos de ataques violentos, ante el grito desgarrador de Andrea toda la actividad paranormal cesó inmediatamente y enseguida llamaron al médico para que atendieran a sus amigas. Andrea estuvo detenida tres días, pero ante la declaración de sus amigas de que ella nada había tenido que ver con los ataques, salió en libertad. A los pocos meses, la joven llegó a la conclusión  de que la entidad que se presentó durante esa sesión de Ouija había sido su madre, quien solía ser muy posesiva y no la dejaba tener ningún tipo de amistad ni relación con otras personas.

 

Hay cientos de historias, evidentemente tantas como experiencias le han pasado a las personas que se han adentrado en este mundo. Cada una de ellas nos comenta casos increíbles. Conocer la veracidad de ellas es imposible; unos dirán que es energía, que alguien mueve el puntero, que es trampa, que es verdad, que el humo de las velas o el olor a incienso nos marea, ¿cuál es la verdad? Lo que tenemos que tener claro es que la Ouija es uno de los métodos más conocidos para contactar con los seres del mas allá y la veracidad de las historias, a veces aterradores, queda en la conciencia de cada uno. Todo lo que produce miedo atrae a las personas por el misterio que encierra, y nos hace entrar en un mundo que al ser desconocido es también muy peligroso.

También hay historias que nos cuentan cómo se ha abierto una puerta “al otro lado” descubriendo a través de las preguntas realizadas cosas que no deberíamos saber y que naturalmente no sabemos si son ciertas, ya que de momento nadie tiene ese conocimiento.

Por último, una persona cuenta que en una sesión de ouija a la que asistieron 4 personas. ninguna de ellas en ese momento experta, contactaron con dos espíritus, uno de ellos español y el otro un niño mexicano; el primer ser contactado, al preguntarle si era un espíritu bueno o malo les dijo que era bueno, que había muerto en un accidente no habiendo podido decir algo importante a su esposa. Le preguntaron qué era y si le podían ayudar, a lo que él les contestó que sí, les facilitó la dirección  y el mensaje que quería decir a su esposa y se fue agradecido, teniendo la seguridad de que le iban a hacer caso.

El segundo ser que les vino a la sesión fue un espíritu de un niño mexicano que, al preguntarle si había vida después de esta vida, les dijo que no les podía dar esa información porque les está prohibido, que le parecía mal que todo esto se tomara como un juego y que se sentía enfadado por tomar todo a broma; Ese espíritu de repente dio una información a uno de los participantes: «tu pareja está esperándote abajo». En ese momento llamaron al portero automático para avisar a esta persona para que bajara. Era su pareja. De pronto, nada más que esta persona abandonó la habitación, se levantó un terrible aire, se abrieron y cerraron las ventanas y puertas tirando todo lo que en ella había. Se apagaban y encendían las luces, los objetos comenzaron a volar, siendo peligroso estar en esa habitación. Desde la calle la persona que segundos antes había abandonado la sesión, vio y oyó junto con su pareja todo lo que pasaba allí dentro. Uno de los participantes rompió el vaso (que les servía de puntero) y todo se calmó. ¿Por qué el espíritu quiso salvar a una de las participantes? Los asistentes a esa sesión fueron a la dirección que el primer ser les había facilitado, y encontraron allí a la esposa (tal y como les había indicado) y al transmitirla el mensaje se echó a llorar entendiendo lo que le habían dicho, ya que para ellos no tenía ningún sentido. Hicieron feliz a esa persona, pero ellos quedaron impactados.

Os podría relatar más casos pero nada cambiaría, las personas que creen seguirán creyendo y los que son escépticos nada les hará cejar en su empeño.

¿Realidad, energía, juego, espíritus, imaginación, mundos paralelos, puertas al mas allá?, ¿Quién lo sabe?

Confieso haber entrado  en este mundo, creo en ello, pero también es cierto que una vez practicado y visto lo que vi, presenciando lo que presencié, prefiero tenerlo en el recuerdo y no experimentar o investigar con… lo que quiera que sea. Lo que sé es que nunca, nunca lo podré olvidar y en mí y en los otros participantes nos queda una experiencia única e inolvidable.

Si alguno de los que estáis leyendo esto queréis contar vuestras experiencias, nos encantará conocerlas.

Por último recordar que aunque se vende como un juego, no olvidemos que es peligroso y que con todo lo que es desconocido es importante tomar las debidas precauciones. La verdad nadie la sabe. Todos buscamos respuestas, pero cuidado con dónde encontrarlas.

 

Siempre se ha creído que existe algo que se llama destino, pero siempre se ha creído también que hay otra cosa que se llama albedrío. Lo que califica al hombre es el equilibrio de esa contradicción. (Gilbert Kieth Chesterton)

 

Autora: Maria Jesús Diezhandino  

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