Un investigador del Instituto Tecnológico de Masachussetts, llamado Dhairya Dand, ha creado unos cubitos de hielo, que brillan con diferentes colores, en función de la cantidad de alcohol consumida, y como añadido, los colores varían al ritmo de la música que haya en el ambiente.
Dand ha construido tres prototipos, cada uno consta de un circuito electrónico programable, una pila de botón y una bombilla led, todo ello recubierto por una gelatina en forma de cubito de hielo.
Ha ideado tres porque: el primero, desprende una luz verde, e indica que se ha bebido en dosis razonables, el segundo, de color amarillo avisa que se ha bebido bastante, y el tercero, de color rojo, aconseja que no se debe beber más.
A parte de los colores, para darle un toque divertido a su creación, Dand los ha programado para que se enciendan al ritmo de la música.
En una entrevista al diario, The Huffington Post, Dand ha afirmado que pretendió crear un dispositivo gracioso, para poder llevar a una fiesta, pero al mismo tiempo que fuera un elemento fiable para controlar la ingesta de alcohol.
Os preguntaréis cómo detecta el invento cuánta cantidad de alcohol se ha bebido. Es sencillo, cada cubito incorpora un acelerómetro, que permite detectar los movimientos de la copa y saber cuántos sorbos se han dado. También es capaz de detectar cuando la bebida se termina o cuando comenzamos con una nueva. Una ecuación entre el número de copas que se han bebido y el tiempo en el que lo hemos realizado, determina el color de los cubitos.
En caso que el usuario no pudiera dejar de beber, el sistema que previamente se conecta al teléfono móvil del usuario, enviaría mensajes de texto a sus amigos para alertarles de la situación.
De momento es un prototipo, ¿se llegará a comercializar?
Fuente: Diario El Correo, edición digital
Redacción: Aitziber López Marín
Pues no sé si llegaran a comercializarse, pero tengo el convencimiento de que ya hay cubitos que avisan a la guardia civil para que hagan los controles cuando sales de los garitos harto de empinar el codo.
¿Casualidad? Probar a ir de cena o de fiesta y no tomar una gota de alcohol. No verás ni uno!!
¡Menudo invento! Me temo que cuando llegue al rojo uno ya no estará para distinguir colores…