Milan Kundera nació un día como hoy en Brno (antigua Checoslovaquia), en 1929. Fue pianista de jazz, afiliado al Partido Comunista, del que fue expulsado en 1948 y en 1970 la última vez que lo intentó. En 1968, a consecuencia de la invasión soviética a su país y sus obras se prohibieron. Tragedias de la historia que no somos capaces de entender. Se exilió a Francia en 1975, y en el 81 obtuvo la nacionalidad francesa.
Su primera novela fue La Broma, y más tarde llegaría su archiconocida La insoportable levedad del ser. Su bibliografía la componen novelas, ensayos, poesía e incluso una obra de teatro que rebosa de ironía.
Kundera tiene un estilo propio en su forma de describir personajes de una manera personal, psicológica y tan profunda que parece arrastrarte a la psique del mismo. Sueños interpretados mezclando psicoanálisis y alegorías. Añoranza por la tierra abandonada, el amor como motivo de desesperanza, frustración y desconcierto. La sexualidad entendida de una forma íntimamente particular, desgarradora.
Bibliografía
La broma (1967)
La vida está en otra parte (1972)
La despedida ( 1973)
El libro de la risa y el olvido (1978)
La insoportable levedad del ser ( 1984)
La inmortalidad (1988)
La lentitud (1995)
La identidad (1998)
La ignorancia (2000)
- Relatos
El libro de los amores ridículos (1968)
- Poesía
El hombre es mi jardín (1953)
Monólogos (1957-1965)
- Teatro
Jacques y su amo: Homenaje a Denis Diderot en tres actos (1981)
- Ensayos
El arte de la novela (1986)
Los testamentos traicionados (1992)
El telón (2005)
Un encuentro (2009)
¡Felicidades, Kundera!
Redactora: Beatriz Ibán Diezhandino
No tenía ni idea que Kundera tenía en su bibliografía dos «perlas» de poesía. Gracias por el articulo. Imposible dejarlo pasar!
Tenías que escribirlo tú este artículo sí o sí!!! jejeje Ya sabes que de Kundera solo he leído uno (El libro de los amores ridículos, que por cierto me gustó mucho). Tengo pendiente el de La insoportable levedad del ser desde hace la tira, puede que ya sea hora de empezarlo no? 😉
¡FELICIDADES! y que sean muchos más, que lo bueno y magistral deberia durar eternamente.
besillos y muy buen articulo!