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Con 84 sonrisas y una mirada, serena, por sentirse realizada como persona y mujer, y sintiéndose feliz por haber conseguido su sueño; así llegó Mercedes, a la Casa de la Cultura de Monzón (Huesca) donde se realizó el acto en el que presentaba su primer libro. En él os podéis encontrar versos y prosa y como bien indica su título: leeréis en él, sus vivencias, alegrías, sueños, letras sobre la naturaleza, el amor, la nostalgia, la solidaridad, la reivindicación y las preocupaciones, y esto es tan solo una muestra de su trayectoria vital. Ya que como nos dice la autora “tengo cinco cajones llenos de escritos y sigo escribiendo aunque con cierta dificultad” añade después de comentar el daño que tiene en un brazo desde hace dos años; y que ya apenas mover. Pero ni eso, le ha quitado la ilusión por continuar haciendo aquello que la hace feliz: escribir. Con satisfacción confiesa “he inventado un método para escribir mejor en el ordenador”
La persona y su vida
Quiero aclarar que Mercedes Cardona Samsó es un mujer discapacitada que se mueve en silla de ruedas y que a día de hoy tiene 84 años y si la vida le deja, pronto cumplirá un años más.
En el año 1.931 enfermó de golpe provocándole unas fiebres muy altas. Nadie sabía el por qué, y cuando lo descubrieron ya era demasiado tarde, le atacó la Poliomielitis “En aquella época no se había descubierto la vacuna, era como una lotería, con la diferencia de que esto dura toda una vida” comenta cuando pregunto por el motivo de su discapacidad.
Escribía desde la infancia y cuando no lo hacía leía los versos de su padre “pero a escondidas” rebela recordándolo entre la admiración que sentía por él; “era una persona muy culta, profesor y participante en el L’Ateneu Catalá”, pero con un deje de resquemor por qué los abandonó, a ella y a su familia, sin entender los motivos, cuando tan solo era una niña.
Sin embargo se le ilumina la cara cuando habla de su madre. Fue ella la que luchó por que volviera caminar. “¡Era una gran mujer! No creo que exista otra igual” Asegura que fueron unos años muy duros debido a las 7 operaciones a las que fue sometida hasta los 18 años.
Rememora aquellos años y los de la juventud con cierta amargura, ya que su estado le impedía hacer lo que hacia cualquier otra joven de su edad.
El tiempo en el que le tocó vivir era difícil y duro, para su familia lo más importante era “ser honrado y trabajador” lo demás, su mundo interior, sus sentimientos… no contaban. Se siente triste cuando recuerda que quemaron los versos que su padre había dejado; incluso cuando quemaron los suyos, a pesar de esa circunstancia que la hundió un poco más, siguió escribiendo contra viento y marea.
Con todo este bagaje, se casó. Tiene dos hijos y 4 nietos.
Fue ya en la madurez cuando cambio, decidiendo aparcar la amargura y la tristeza, por la paz y la serenidad que la caracteriza.
Llegó a Monzón (Huesca) hace 13 años y en aquellos años se encontró una localidad llena de obstáculos para una mujer minusválida como ella. Su inseparable compañera, su silla de ruedas, le impedía acceder hasta a un simple aseo. Se la llegó a conocer como “la protestona catalana”, pero gracias a ella los accesos para discapacitados fueron cambiando.
Confiesa que una de las cosas que buscó en Monzón cuando llegó “fue un acupuntor” al cual sigue acudiendo para aliviar sus dolores. “No me gusta tomar tanto potinche”
Posee una gran vena creativa que ha desarrollado hasta hace bien poco, también en la pintura. Los pinceles, y el óleo fueron la gran medicina de Mercedes. Comenzó con ella a los 55 y través de ella y la escritura ha conseguido ser quien es: Una mujer serena, alegre, sincera por encima de todo, luchadora a pesar de su gran discapacidad y de sus 84 años.
“La vida sigue, no nos podemos estancar por cualquier bache o por un gran agujero” refiriéndose a la discapacidad cuando no es de nacimiento.
Hoy por hoy, sigue escribiendo pero debido a que su brazo se ha quedado muerto, ya no puede pintar, pero sigue transcribiendo pensamientos y sentirs,con mucha ilusión. Ya está pensando en el siguiente libro e incluso, en escribir ella misma sus memorias. “Cuando pare de hacer las cosas, ya me podéis preparar la caja” añade con su humor típico.
Inspiración
Entre el verde de la naturaleza y el azul del mar, discurre su inspiración; como también en el poeta catalán Mariá Manent. También se nutre del entorno social, la crisis y todo los que nos rodea actualmente.
Lectura
Y como buena escritora, es una buena lectora. Se decanta por los libros de Psicología o como los llama ella “los que te hacen pensar. No me gustan los de historia, porque no son ciertas, es imposible declara con solemnidad.
El libro
Este ha salido a la luz como autoedición, gracias a la ayuda de Ado Miguel Servet de Huesca, y agradece a María y Carlos, trabajadores de la asociación Bolskan, toda su ayuda.
Y empieza así, con una breve biografía de la autora. “Aterricé en este hermoso planeta el 26 de Agosto de 1.929 en Barcelona, a las cuatro de la tarde de un caluroso día de verano. Viví en el Barrio de San Andrés”
Decir que este pequeño gran libro es: “Un canto a la vida, y la ilusión hecha presente de una luchadora, de una persona íntegra, de una mujer de hoy y de siempre” Esta recopilación, es un compendio de textos e imágenes, estas últimas, son las fotografías de algunos de los cuadros que ha realizado la propia autora cuando podía pintar.
Su libro “Vivencias, sueños y poemas” de momento están a la venta en una librería de Monzón, y está pesando en futuras distribuciones.
Y para terminar, como habéis comprobado ya, nuestras limitaciones solo están en nuestra mente y como se suele decir: “Querer es poder”
Redacción y fotografía: Luisa Fernanda Barón Cuello
Molt Bé Marçe eres una gran dona!.
Moltes felicitats i per molts anys.