Cada vez más famosos se apuntan a esta “novedosas” terapia, la última de la que tenemos constancia es Penélope Cruz, quien en su última visita a nuestro país, para la presentación de su última película “ Volver a nacer“, lucía en su oreja izquierda cuatro pequeñas agujitas doradas, apenas perceptibles a primera vista.
Hoy en Pandora Magazine, nos vamos a adentrar en los beneficios, e inconvenientes de esta milenaria técnica.
También llamada auriculopuntura o auriculomedicina, es una terapia que forma parte de Medicina Tradicional China, con un simple funcionamiento: estimular los puntos reflejos de la oreja. Para ello se utilizan semillas de mostaza, pequeñas bolitas de metal o pequeñísimas agujitas, que se llevan puestas durante unos días, tapadas con esparadrapo.
Se basa en que en la oreja existen determinados puntos reflejos que correctamente estimulados provocan una reacción del sistema nervioso sobre el órgano o zona afectada que ayuda a su curación o mejora.
El especialista, mide la resistencia eléctrica de los puntos, a través de un aparato, cuando existe un problema de salud, se detecta una alteración en la resistencia eléctrica del punto reflejo de la oreja, produciéndose un sonido o un cambio de tono.
La oreja representa, el cuerpo de un feto invertido: así el lóbulo simboliza la cabeza, el interior de la oreja el abdomen y el reborde externo la columna vertebral.
Esta técnica se remonta a unos 4.000 o 5.000 años antes de Cristo. Al principio únicamente se conocían algunos puntos, hasta se fue detallando el «mapa auricular o de los puntos reflejos de la oreja».
En Egipto, Persia, Grecia, Roma, y China, también conocía el uso de la Auriculoterapia, no obstante, solo tenían conocimiento de parte de los puntos, sin conocer las razones de su eficacia.
Los primeros documentos escritos que relacionan la oreja y los meridianos, llamados “nadi”, así como el diagnóstico observando el pabellón auricular, están datados en el año 400 a. C. en China. Aunque es durante la dinastía Tang cuando se difundió en la medicina china la estimulación de la oreja como terapia contra algunos trastornos del cuerpo humano.
El egiptólogo Alexandre Varille, constató en sus estudios que las mujeres egipcias que no deseaban tener más hijos se perforaban el pabellón de la oreja. En Grecia los médicos Hipócrates y Galeno expusieron la relación de las perforaciones en la oreja con trastornos menstruales y sexuales. En Persia, se utilizaban cauterizaciones en la oreja como tratamiento de la ciática.
A partir del siglo XVI con el auge del comercio entre Europa y Asia, la acupuntura y la Auriculoterapia, comienzan a adquirir notoriedad. Así, el médico portugués Abraham Zacutus Lusitanus, describió la utilización de las cauterizaciones en los pabellones auriculares para el tratamiento de la neuralgia ciática, el médico y anatómico italiano Antonio María Valsalva.
En Francia toma especial importancia en 1927 tras constituirse en París, la Sociedad Internacional de Acupuntura, gracias a George Soulié de Morant, quien fuera cónsul francés en Pekín, encargado de divulgar la Medicina Tradicional China.
En 1950 el doctor Paul Nogier, estableció por primera vez un mapa completo de la oreja con los puntos más importantes y su relación con los órganos de nuestro cuerpo. Su concepto, en la Auriculoterapia, de relación oreja y feto invertido continúa estando de actualidad.
Posteriormente, Jacques Niboyet estudió la resistencia al paso de la corriente eléctrica de los puntos acupunturales, lo que permitió el diseño de aparatos que permitían localizar los puntos activos de forma precisa. Desde este momento se pudo ir completando la cartografía auricular, cada vez con más precisión.
La Auriculoterapia tiene como puntos a su favor, que es fácil de aprender y de aplicar, siendo prácticamente indolora, proporcionando resultados rápidos, tanto al ser utilizada como método de diagnóstico como de tratamiento.
Recientemente ha experimentado un auge en su uso, ya que comienza a utilizarse como método de adelgazamiento y de tratamiento para combatir las adicciones como el tabaco. Así mismo, proporciona buenos resultados en trastornos endocrinos, dolores de cualquier tipo y localización, trastornos psíquicos, ansiedad, alergias, e insomnio.
Sin embargo, el tratamiento tiene escaso resultado si se practica tras realizar un gran esfuerzo físico o mental. Tampoco se recomienda a personas que tomen altas dosis de psicofármacos, tengan enfermedades hereditarias o trastornos degenerativos, esquizofrenia, depresión endógena, anemias, principios de apendicitis, enfermedades contagiosas y de transmisión sexual y enfermedades que afecten a la médula espinal.
Esta terapia también está contraindicada en aquellos casos en que esté afectada la oreja por quemaduras, cortes, úlceras o eczemas y en mujeres embarazadas.
Expertos aseguran que reduce uno de los principales problemas de sobrepeso, la ansiedad por la ingesta de alimentos y bloquea los estímulos que envían nuestras papilas gustativas y las señales del estómago hacia cerebro.
Se puede realizar de manera ambulatoria, en menos de 10 minutos y sin dolor, experimentando de inmediato beneficios en la disminución de la ansiedad. Las sesiones, deben ser realizadas por un profesional de acupuntura, o con conocimientos básicos en acupresión, cada tres días durante dos semanas.
El proceso es sencillo: con el paciente tumbado sobre una camilla, se realizar la asepsia y antisepsia del pabellón auricular, se proceden a pinchar o introducir pequeñas micro agujas en tres sitios o centros de estímulos básicos del oídos para bloquear los impulsos de pequeñas raíces vágales que se conectan con el cerebro, colaborando de esta forma a inhibir el apetito y disminuir la ansiedad por ingerir alimentos. Con este procedimiento, aseguran que se pueden llegar a perder hasta 10 kg.
Sin embargo, una vez más, cabe destacar que no es una terapia milagrosa ya que es absolutamente necesaria una dieta, un control médico y hacer deporte, como en cualquier régimen.
Redacción: Aitziber López Marín
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