Crítica | «Antes del frío invierno», no hay rosas sin espinas

Print Friendly, PDF & Email
3 Votos obtenidos¡Vótame!

.

ANTES DEL FRIO INVIERNO-CARTEL.inddTítulo: Antes del frío invierno (Avant l’hiver)

Dirección: Philippe Claudel

Guión: Philippe Claudel

Reparto: Kristin Scott Thomas, Daniel Auteuil, Leïla Bekhti, Vicky Krieps, Richard Berry, Jérôme Varanfrain, Laure Killing, Anne Metzler, Laurent Claret, Jean-François Wolff

Género: Drama

Duración: 103 minutos

Año: 2013

País: Francia

Música: André Dziezuk

Fotografía: Denis Lenoir

Productora: Co-producción Francia-Luxemburgo / Les films du 24

Distribuidora: Golem distribución

El simple gesto de recibir un ramo de flores puede llevarnos a diversas interpretaciones según el contexto en el que nos encontremos, unas rosas en el momento indicado pueden indicarnos el fallecimiento de un familiar o el amor que se profesa por un ser querido.

Paul (interpretado de forma esplendida por Daniel Auteil), un neurocirujano experimentado de 60 años recibirá rosas de forma indiscriminada sin conocer el remitente lo que será el detonante para un thriller, que como espinas de rosas, acabaran hiriendo a su propia familia, mostrándonos que el transcurso del tiempo oculta muchas cicatrices de las que nunca nos atrevemos a dar explicaciones.

foto-01Este tormento por conocer a su seguidor anónimo llevara a Paul a un encuentro fortuito con una camarera (Leïla Bekhti de Paris, je t’aime”, 2006) llamada Lou, que entrara en su vida del mismo modo que Paul opera a sus pacientes. Las sospechas infundadas por pensar que ella es la persona que está detrás de este acoso perseverante hacia su persona, llevaran a nuestro neurocirujano especializado, a meterse en la cabeza de los demás y a ser embaucado por los secretos de una veinteañera de dudosa procedencia.

Philippe Claudel firma su tercera película tras su buen hacer en el mundo de la literatura, mostrándonos una historia donde confieren dramas familiares envueltos en un halo de misterio por saber quién es el admirador enigmático de Paul. Estamos ante la vida de un niño mimado, del que lo tiene todo pero no tiene nada y del que cree saberlo todo, pero no sabe lo que pasa en su propio hogar o del que ha visto pasar la vida pero no ha vivido lo suficiente para disfrutarla. El escritor francés indaga en el lado sombrío de la condición humana como ya hacía en sus novelas ofreciéndonos los secretos de alcoba de una familia de clase alta.

foto-02Lucie como mujer de Paul (Kristin Scott Thomas repite con Claudel tras Hace mucho que te quiero”, 2008) es una ama de casa, vive enclaustrada en su hogar de enormes ventanales que dejan pasar la luz pero que sin embargo nos muestran una Kristin Scott Thomas completamente opaca y que vive por y para su marido, fría como un tempano e inquebrantable como un diamante. Son una familia francesa con muchos problemas, un hijo que no sigue los pasos del patriarca, una cuñada con serios problemas de autoestima… incluso Richard Berry como amigo de juventud nos tendrá alguna que otra sorpresa inesperada para Paul.

Ahora bien, nos encontramos con una historia de indicios y suposiciones, de tomar con pinzas los diálogos, donde es difícil discernir entre el grano y la paja, no nos dan toda la información porque los personajes no les interesa que se sepa todo de ellos, cada uno lleva en su interior su propia careta y con eso juega constantemente Philippe, no busca que les comprendamos, entendamos o porque actúan como tal, más bien busca que el espectador idealice su propia opinión personal del organigrama que nos presenta en pantalla.

foto-07Es una película con un ritmo pausado, donde los trapos sucios de la familia de Paul acaban devorando el thriller que nunca acaba uno por vislumbrar. A pesar de esto, hay que elogiar la fotografía de Denis Lenoir, ese paso del otoño al invierno es cuanto menos que reseñable. Los veteranos Richard Berry y Daniel Auteuil están en la plenitud de sus carreras cinematográficas mientras que Kristin Scott Thomas mantiene el tipo como medianamente puede recordando tiempos mejores.

Lo mejor: No invita a tomar conjeturas de forma precipitada, desconcierta el final pero busca que cada cual saque sus propias conclusiones sin dar muchas explicaciones. Lo peor: El intento de thriller, como tal no funciona como debería. Incluso acaba por pasar a un segundo plano en detrimento a los dramas familiares de Paul que se nos presentan.

Crítica: Iván Heral

Sobre Maria José Díaz-Maroto García

Cinéfila empedernida buscando la serie perfecta. Combino mi pasión por el cine con las series y los libros. Redactora Jefe de Cine de esta gran comunidad que es Pandora Magazine y propietaria de un pequeño blog donde extiendo mi pasión por el cine, la literatura, las series y etcétera: 'Delirios, Literatura, Cómics y Películas'.