Cuando escuchamos el nombre de Bill Gates, lo primero que nos viene a la cabeza es Microsoft. Y aunque abandonó parcialmente la empresa para dejarla en manos de Steve Ballmer, su nombre permanecerá unido por siempre a la empresa en donde desarrolló uno de los sistemas operativos más populares del mundo: Windows.
Ahora ha ofrecido a través de su fundación 100.000 dólares de financiación inicial para quien consiga desarrollar una nueva generación de condones. Y aunque su aportación filantrópica sea muy loable, me resulta un tanto extraño viniendo de quien viene ¿Cuál será su idea sobre los preservativos del futuro? ¿De qué material estarán hechos? ¿Vendrán con aplicador incorporado? ¿Serán ecológicos y por lo tanto reutilizables? Espero que esto último no, porque no me resulta cómodo subir al terrado de mi escalera y poner a secar los condones al lado de los calcetines. Ya me veo los comentarios de los vecinos el día que no los suba a tender ¿Qué, Miguel, esta semana a dos velas eeeh?
Les podrá parecer una tontería, pero no es un tema baladí ya que en las últimas décadas el preservativo apenas ha evolucionado, y no se ha tenido en cuenta que amplios sectores de la población mundial rechazan su uso por razones culturales, porque consideran que su uso reduce el placer sexual o porque han desarrollado cierta intolerancia al látex.
Si alguno piensa que los métodos anticonceptivos –entre ellos el preservativo- son inventos más o menos modernos está totalmente equivocado. En el origen de los tiempos y cuando el hombre vivía en la cavernas ya existían los anticonceptivos de origen animal. Concretamente el de Tiranosaurio. Esté se comía a los cavernícolas cuando iban de cacería, por lo que su influencia en el control de la natalidad fue más que destacada. Algunos miles años después y en la edad media, los guerreros que iban a luchar a tierra santa se procuraron de lo que fue el primer anticonceptivo femenino. La pega es que en vez de ir por dentro de la señora iba por fuera, en un armazón metálico y unido a un candado de hierro. Ni que decir que muchas murieron por la infección, y las que no lo hicieron poco pudieron disfrutar de los hombres que pudieron volver.
No se sabe a ciencia cierta cuando apareció el primer condón, pero algunos atribuyen a un médico inglés como el primero que lo ideó con un aspecto y textura parecida a la actual. No lo consiguió a la primera claro, ya que al principio eran de lana. Abrigaban mucho si, pero resultaban un tanto incómodos. Luego probó hacerlos de punto pero tenían muchos agujeros y resultaban poco efectivos. Al final dio en el clavo: tripa de animal recubierta con una película de aceite o lubricante. La duda que me corroe es ¿Cómo hizo para probarlo? Porque supongo que no le diría a la mujer aquello de “cariño, voy hacerte el amor con los intestinos de una oveja para probar si te gusta”. No creo que su santa esposa estuviera muy receptiva ante la perspectiva.
La cuestión es que llegados a este punto, los preservativos tal y como lo conocemos están a punto de desaparecer si al final prospera el proyecto de Bill Gates. 
Y una vez desarrollados, a ver cómo piensa hacer la presentación mundial… espero que no se le ocurra poner a un señor en pelota picada, subido a un escenario con el condón puesto, y diciendo aquello que vendrá en tres versiones: Home, Basic y Premium. La primera versión para hacer el amor en casa, la segunda para los que “mojan” ocasionalmente y la tercera, para los más promiscuos. Aunque al fin y al cabo, la experiencia de usuario dirá que versión interesa más. Además de las versiones anteriormente mencionadas, saldrán al mercado con todo tipo de sabores excepto el de manzana, no sea que Apple los demande por un rollo de patentes y demás.
Como viene siendo habitual en todos sus productos, no sería de extrañar que ese mismo día los preservativos presenten alguna vulnerabilidad de seguridad y haya que colocar un parche, ya que no creo que a nadie le guste que un hacker aproveche ese fallo para entrar en tu sistema por la puerta trasera –backdoor- Y aunque todas las versiones contaran con antivirus para evitar contagios no deseados, es fácil que se te cuele un gusano dentro antes de que te des cuenta. Y por último, si son reutilizables ¿Irán a la papelera de reciclaje antes de eliminarlos por completo?
Pero si después de todo no estas convencido del uso de preservativos por una u otra razón, y quieres tener sexo en pareja sin riesgos ni embarazos no deseados, pídele a tu chica que haga palmas mientras tú te la…te vas apañando al ritmo de las palmas de ella.
Eso sí que es sexo seguro.
Redacción: Miguel Soria López
Como todo lo que escribes ¡genial!
Gracias María Jesús. Eso es porque me miras con muy buenos ojos 😉
Un beso
Miguel