Hace unos días saltaba a los medios la noticia de la fallida restauración del Ecce Homo de Borja, en Zaragoza. Cecilia Giménez, una anciana de 82 años, vecina de la localidad, se encargó por su cuenta de llevar a cabo esta restauración de la obra del artista Elías García Martínez, de principios del siglo XX. Cecilia además aseguraba que se había encargado anteriormente de otras restauraciones, y que todo el pueblo sabía lo que ella estaba haciendo, ya que lo hacía a plena luz del día.
Nada más saberse la noticia, empezaron a llegar visitantes a la Iglesia del Santuario de la Misericordia para ver esta «restauración». Los habitantes de la localidad están desbordados con tanta publicidad y repercusión mediática. En sólo unos días, las redes sociales no han dejado de hablar de ello, y ya hay peticiones para que se deje la pintura tal y como la dejó Cecilia. El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Borja, Juan María Ojeda, no tiene intención alguna de dejar el Ecce Homo tal y como está, ya que «el revuelo suscitado en internet es sólo una moda pasajera» y hay que tener respeto por el arte y la obra del artista original.
A partir del lunes, se personará un grupo de restauradores para intentar recuperar la obra original. Mientras tanto, el pueblo zaragozano de Borja disfruta de la fama mundial que le ha proporcionado una de sus entrañables vecinas.
Si es que… más que marear a la pobre anciana que, está claro que la pobre ha perdido sus facultades artísticas o que tuvo un muy mal día cuando hizo el rostro… que culpen a los que le encargaron el trabajo por no saber elegir mejor al restaurador, esos sí que tienen buen ojo.
Arte tiembla ante el pincel de esta buena mujer!
Ojalá que la puedan recuperar porque no se puede quedar así por muy famosa que se haya hecho esta restauración. Estoy de acuerdo con lo que dice el señor concejal porque ante todo hay que tener respeto por la obra original del artista a pesar de esta fama. Pobre mujer, ahora sí que se le acabó restaurar. Y como dice la compañera Lyns, que elijan mejor al restaurador la próxima vez.