Hoy os voy a hablar de un libro muy interesante que llegó hace un tiempo a mis manos y que voy a compartir con vosotros. Se trata de El sendero del horror y su autor es Javier Núñez. Él mismo nos cuenta como surgió su pasión por la escritura en estas entrañables líneas:
Nací en enero de 1980, en Zaragoza. A los trece años, durante un verano especialmente aburrido, le pedí a mi padre que me comprara un libro de la papelería del pueblo y me trajo “Misery”, de Stephen King. A los diecisiete, para clase de Lenguaje, nos pidieron escribir un cuento de unas diez páginas. Nos dieron un mes de plazo. Cuando lo entregué superaba las cien. Desde entonces, no he dejado de escribir. Recientemente, he publicado en Amazon los e-books “El sendero del Horror”, que contiene dos de mis mejores cuentos de terror y “Esclavos de La Tierra”, una novela de acción con un toque apocalíptico. Además, tengo varias novelas largas terminadas en diferentes estados de corrección y actualmente me hallo escribiendo otra.
El sendero del horror, la novela que ocupa nuestro espacio de reseñas hoy, consta de dos relatos muy diferentes entre sí aunque con un nexo común: una atmósfera de misterio e inquietud, de esas que te hacen sentir claramente que, lo que estás leyendo forma parte del género terrorífico y, en mayor o menor grado, te va a llevar a experimentar momentos espeluznantes.
En A CONTRARRELOJ, un profesor de instituto que pasa por un mal momento en su matrimonio recibe una petición de auxilio… a través de la impresora de su ordenador.
Decidir averiguar quién está detrás de aquel desesperado grito de socorro y acudir en su ayuda será la peor decisión que haya tomado en su vida.
– En LA MONEDA MALDITA , un chico encuentra una moneda de aspecto antiguo. Parece poco más que un pedazo de chatarra. El problema es que quién la posee se encuentra en serio peligro de muerte.
Algo que me gusta especialmente del género de terror es esa sensación de mal rollo que planea en el ambiente de la historia desde el principio. Porque, aunque todo comience en un día soleado con el prota besando a su preciosa y rubia mujer mientras su perro labrador le trae la pelota, tú ya sabes que algo malo va a pasar… con suerte, algo muy malo. Y por eso adoro el terror. Dentro de una historia así, sucederán cosas sin ningún tipo de explicación lógica muchas veces (otras sí, depende de la historia, claro) y no se la debes buscar porque, en el universo del terror todo es posible. Todo lo malo.
«A contrarreloj» y «La moneda maldita», dos historias breves que te enganchan por varias razones: ambas historias tienen un planteamiento interesante, las sinopsis atraen ya de por sí y, una vez te adentras en sus páginas, la prosa del autor te convence enseguida. Se nota que Javier Núñez lleva años cultivando su estilo o eso, o que tiene un talento para la palabra escrita notable. Yo me inclino por un poco de ambas cosas. Su estilo es bastante descriptivo, quizás, en algunos momentos demasiado (esto para los lectores que se distraen con facilidad-yo misma en ocasiones-, puede resultar peligroso) pero tampoco es excesivo, así que el ritmo no se ve afectado sino que le aporta riqueza a la acción. También hace gala de un amplio vocabulario, algo que también dota de profesionalidad a la obra.
Vamos, que está bien escrito y se lee muy cómodamente. Núñez se emplea a fondo a la hora de describir cada hilo de la trama para que podamos imaginar a la perfección lo que él quiere que veamos, muy cinematográfico.
En cuanto a «A contrarreloj», el primer relato que compone este libro, debo decir que en un principio me desconcertó la ilógica situación que se le plantea a ese profesor de instituto, aburrido y deprimido por su reciente separación: una llamada de socorro a través de su propia impresora. Pero la curiosidad te pica mientras recuerdas que estas en un universo paralelo, el del terror, y ahí todo es posible. A partir de ese momento, la historia transcurre de modo rápido y efectivo: el estrés y la obsesión del protagonista por encontrar una explicación para lo que le ocurre y, después, la búsqueda de esa víctima que se comunica de manera, supuestamente, extrasensorial.
¿Locura? ¿Fantasmas? Podrás pensar varias cosas a medida que lees «A contrarreloj» pero ninguna coincidirá con el espeluznante y sorprendente final. Ahí lo dejo.
«La moneda maldita» es un relato de esos típicos que siempre me han gustado especialmente… El tema de las maldiciones. Tan manido pero siempre tan eficaz al mismo tiempo. Como su título indica, una extraña y antigua moneda llega a manos del protagonista y, a partir de ahí, vivimos su día a día junto a su pareja, donde él comienza a experimentar algunos comportamientos inconscientes que derivan en sucesos extraños y que hacen peligrar su vida…
He disfrutado bastante con esta historia porque, como he dicho antes, el tema maldiciones me chifla y Núñez lo ha sabido llevar de modo que engancha desde el principio y te guía en una accidentada travesía hasta otro final, de nuevo, crudo y sorprendente.
Me han llamado la atención los finales de este autor… Escribir un final es casi (al menos para mí) lo más difícil de un relato o novela porque algo muy bueno se puede ver seriamente dañado si no le das el matarile perfecto.
Javier Núñez apuesta por el tipo de final que yo definiría a mi manera como «final hachazo». Es decir, ese final que te presenta toda la resolución de golpe y que, en un principio, puede resultar indigesto, pero unos segundos después, ves que ha tenido su efecto: te ha dejado patidifuso y quizás, ese era el objetivo del autor. Por tanto, objetivo conseguido, ¿no?
Me ha gustado leer por primera vez a este prometedor autor, de prosa limpia y currada, con buenas ideas y buen hacer en general.
Así que, si queréis pasar un rato entretenido y unos cuantos escalofríos, entrad en Amazon y por solo 0.89 euros podéis tener este libro en formato digital. ¡Recomendado!
Y, por supuesto, desear mucha suerte y muchas futuras publicaciones a este autor, Javier Núñez. Quedaos con su nombre.
Redacción: Lydia Alfaro
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