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Ficha técnica | Título: Spider-Man: Homecoming. Director: Jon Watts. Guión: John Francis Daley, Jonathan Goldstein, Christopher Ford, Chris McKenna, Jon Watts, Erik Sommers (Personajes: Steve Ditko, Stan Lee). Reparto: Tom Holland, Robert Downey Jr., Michael Keaton, Marisa Tomei, Jacob Batalon,Zendaya, Jon Favreau, Tony Revolori, Laura Harrier. Género: Acción, Ciencia ficción, Superhéroes, Comedia. Duración: 133 minutos. Año: 2017. País: EE.UU. Fotografía: Salvatore Totino. Música: Michael Giacchino. Productora: Columbia Pictures, Marvel Studios, Pascal Pictures. Distribuidora: Sony Pictures Spain.
Tercer comienzo sobre Spider-Man, esta vez tras un acuerdo entre Disney y Sony, donde se desarrollan las aventuras de un Peter Parker aún más adolescente, el cual ya fue introducido al UCM en “Capitán América: Civil War”, distanciándose de las otras películas y obviando los sucesos dramáticos de la vida de Peter, como es la muerte de su tío Ben o el fallecimiento de sus padres y centrándose en el aprendizaje que conlleva la responsabilidad de ser un héroe.
Peter Parker (Tom Holland) es un quinceañero que estudia secundaria mientras lidia con los problemas típicos de la edad: las chicas y el abusón de turno. Aunque en realidad, su día a día no es tan normal como parece. Y es que Peter esconde una identidad secreta, la de Spider-Man. Así que compaginará su vida de adolescente, con la labor de superhéroe, enfrentándose a aquellos villanos que ponen en peligro la ciudad, todo ello sin ser descubierto por su tía May (Marisa Tomei) o sus amigos.
La película se sitúa perfectamente en el Universo Cinematográfico Marvel. A través de una “grabación personal de Peter Parker”, podemos ver al joven tras lo que ocurrió en su casa, cuando Tony Stark se llevó a Peter a Alemania, con la escusa de ofrecerle una beca, hasta su visión del épico enfrentamiento que tuvo lugar entre los bandos de Iron Man y Capitán América. Convencido y emocionado por haber sido parte de ‘Los Vengadores’, vuelve a casa dispuesto a ayudar. Aunque volver a la rutina y adaptarse no será tan fácil. Tampoco lo será en su faceta de héroe, ya que como todos, al principio, mete la pata en más ocasiones de las que querría.
Pues sí, lo confieso, soy una fangirl del Universo Cinematográfico de Marvel. Y de los X-Men cinematográficos también. Y el “Amazing Spider-Man” de Andrew Garfield y Emma Stone también me gustó. Voy a parar, porque como siga confesándome acabaré perdiendo la credibilidad. Pero amigos, hay películas que se miden con una vara diferente, y mi kriptonita particular son las películas de superhéroes, incluyendo las de DCUE. Las veo todas. Hasta el reboot de los “Cuatro fantásticos” fui a verla al cine.
Tom Holland interpreta al tercer Spider-Man cinematográfico tras la bilogía de Marc Webb, con Andrew Garfield y Emma Stone —siento repetirme— y la trilogía de Sam Raimi, donde Tobey Maguire y Kirsten Dunst se ponían en la piel de la pareja protagonista. Sin entrar en comparaciones —al menos en este párrafo—, ni desprestigiar ninguna de las interpretaciones, creo que cada uno ha aportado cosas diferentes.
Volviendo de nuevo a la película. Esta cuenta con un reparto interesante. La nueva incorporación es fresca e ingenúa, un Peter Parker muy interesante. Y aunque no gustó mucho que Marisa Tomei fuera elegida, aporta también a una tía May diferente, con un peso mínimo en la historia. Por otro lado tenemos a un villano a la altura, encarnado por Michael Keaton —un cruce, sobre todo en mi mente, entre Batman y Birdman—, el cual tiene una motivación, más humana que en otros casos, para convertirse en malo y para que mentirnos, lo interpreta muy bien. Y también tenemos a Tony Stark A.K.A. Robert Downey Jr., el cual juega un papel muy secundario, por mucho que lo incluyan en el póster como co-protagonista, aunque sí que es una motivación clave para que el personaje de Tom Holland crezca y no sea un superhéroe acomodado.
No puedo mentir, “Spider-Man Homecoming” me ha gustado. Como adaptación toma cosas interesantes de los cómics y los hace suyos, encajándolo todo en el UCM. La película sería como un Spider-Man: Año Uno, un chico con potencial y poderes que tiene potencial para ser el amigo y vecino que necesitan en su ciudad para luchar contra el mal. Pero claro está, no puede llegar en 20 minutos y pasar de 0 a 100, no, aquí el personaje tiene momentos de superhéroe vergonzosos, donde no acaba de pillarle el truco a lo de ayudar, situaciones en las que intenta demostrar al mundo lo que está destinado a ser, pero sobre todo, es una película de aprendizaje, de conocer al personaje desde cero, dejando de lado dramas tormentosos del nacimiento del personaje, la picadura de la araña, la muerte de tío Ben, el intento de reformular la frase de “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”, como se cose el traje, llena la habitación de tela de araña y demás cosas que ya hemos visto por duplicado. Es una vuelta a casa fresca, con personajes jóvenes, un villano en el que nos podemos reconocer, que no quiere el mal para la humanidad, sino sobrevivir.
En los apartados más técnicos, la película cumple sobradamente, tanto en efectos especiales. Aunque sí que me gustaría destacar la BSO a cargo de Michael Giancchino, la cual es potentísima y aporta muchísimo a la hora de expresar emociones en diversas escenas, sin olvidar el acierto que supone utilizar el tema original de la serie de Spider-Man para darle ese toque para hacer las delicias de los más fanáticos. Por otro lado, las escenas post-créditos, si bien no aportan nada, siempre están entretenidas y son divertidas. Por último destacar los créditos finales, ¡me han encantado!.
El reinicio de uno de los pilares marvelitas es bastante positivo, por lo que para mí se quedará con un 7 o incluso un 7.5, porque a pesar de ser más de lo mismo, el tono es muy diferente a las anteriores producciones y se centran más en el crecimiento del personaje, que en los demonios con los que tiene que lidiar para convertirse en un héroe. Eso es una de las cosas que más me han gustado. La otra es la frescura que le aporta Tom Holland al personaje y la forma en que todo ha encajado, un gran paso para ver a Spidey en el futuro, el acuerdo de Marvel/Disney con Sony ha sido más que productivo, creo que Fox debería tomar ejemplo —guiño, guiño—.
Crítica: María José Díaz-Maroto
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