La polémica ha salpicado una vez más, la entrega de los premios Grammy 2013.
Esta vez, a través de un comunicado redactado por la organización de los galardones y por la cadena de televisión CBS, encargada de la retransmisión de la ceremonia este año.
Días antes de la celebración del evento, las mujeres invitadas recibieron el siguiente mensaje: “La obscenidad total o parcial en el vestuario es inaceptable durante la gala”.
El objetivo era claro, lograr que ninguna de las asistentes enseñase demasiado. Sin embargo, esta “recomendación” no fue tenida en cuenta por numerosas artistas como Jennifer Lopez o Rihanna.
Jennifer Lopez, que eligió un vestido negro con un hombro y una pierna al descubierto, fue muy critíca con esta medida, hasta tal punto, que durante la presentación del primer premio de la ceremonia, el correspondiente a la Mejor interpretación de pop solista, dijo un irónico: “Se nota que he leído el mensaje de la organización”. El público reaccionó con aplausos y risas.
Su compañero en la entrega del premio, el cantante Pitbull, le respondía: “Tú has sido quien ha inspirado ese mensaje” (en referencia al vestido verde de Versace, con escote hasta el ombligo, que la cantante lució en una pasada edición)
Parece que el mensaje no fue tenido en cuenta por muchas de las asistentes a la gala, y es que a lo largo de la alfombra roja del Staples Center, pudieron verse transparencias, escotes pronunciados y vestidos reducidos a la mínima expresión.
Redacción: Aitziber López Marín
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