Reseña: Raquel Villaamil – El aviso de los cuervos

Brigit regresa a su ciudad de nacimiento en búsqueda del único familiar que le queda, su abuela. De los escasos recuerdos que guarda, poco queda en la casi abandonada ciudad de Ballymote. Sus calles, casas y bosques esconden misterios que parecen retroceder a los tiempos en que de las leyendas surgió algo real, algo monstruoso.

Brigit tendrá que encontrar todas las respuestas, buscar entre sus pesadillas y descubrir la verdad en un mundo que ya no es el suyo, y que se rebela de entre las sombras cuando avisan los cuervos.

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Hola.

Hoy vengo supercontenta y es que he podido disfrutar de la lectura del último libro de la que para mí, es mi autora revelación del 2016. Os estoy hablando de Raquel Villaamil, autora de la trilogía Manhattan Beach, si no sabéis de que os estoy hablando os invito a conocer los dos libros que tiene publicados de esta trilogía Manhattan Beach y El año perfecto.

Brigit se ha quedado sola, su madre acaba de morir. No tiene a nadie, y no recuerda casi nada de su infancia. Las dos se han pasado la vida mudándose de una ciudad a otra sin establecer lazos con nadie, pues estaban huyendo de su padre y de un enemigo invisible que, según su madre, quería matarlas. Brigit nunca la cuestionó, aunque pensaba que esos miedos formaban parte de la manía persecutoria que su madre padecía a causa de su enfermedad. Una llamada telefónica le informará que su abuela paterna, que está enferma en un hospital, ha reconocido el nombre de su madre en la esquela del periódico. Una abuela que Brigit no sabía que tenía.

Al conocer la existencia de su abuela, Brigit no dudará en trasladarse desde Nueva York a Ballymote para conocerla. Brigit emprende un viaje en busca de su pasado y de sus raíces, de las que lo desconoce todo por completo.

Conforme se acerca a su destino comenzará a escuchar voces que la advierten del peligro. Al llegar descubrirá un pueblo que parece salido de las mejores películas de terror. Nos encontramos con un pueblo casi fantasma, donde sus habitantes apenas pisan la calle, donde hace mucho tiempo que no nace ningún niño y los jóvenes han dejado atrás para no volver. Un sitio, sin internet, sin cobertura de móvil, ni siquiera hay una gasolinera y con una terrible enfermedad que asola a sus habitantes.

Al llegar conocerá a Mistletoe «Mist», quién le ofrece un lugar donde vivir a cambio de trabajar en su comercio. Mist es un hombre serio, misterioso y parco en palabras. También conocerá a Gabriel, un niño misterioso que se aparece en cualquier parte y a Sonya y Alice, las enfermeras que cuidan a su abuela.

En el hospital conocerá a Ethan Brand, cuya familia, Aidan y Moira, sus padres y Brian, su hermanastro, está muy vinculada al pasado de Brigit. Con Ethan conecta enseguida, pero con Brian, el misterioso hermanastro de Ethan, desde el primer momento se nota la tensión y animadversión mutua. Ethan la invitará a visitarlos e ir ayudándola a recomponer el pasado que apenas recuerda.

«—Hola —dije, pero nadie respondió.

Di un paso más. A mi derecha, a través de un ventanal, se veía la luna en cuarto creciente y varias estrellas entre los huecos que les dejaban las nubes. Había un árbol viejo y retorcido pegado a la ventana de tronco grueso y carente de hojas. Entonces llegó volando un pájaro grande, negro, desde la oscuridad de la noche. Sus ojos se quedaron fijos en los míos.

Era un cuervo.»

En Brigit encontramos una joven decidida a recomponer su pasado y que no se amedrenta ante el misterio que la rodea. Me ha llegado a descuadrar un poco lo fácilmente que se cree la información que va recibiendo de unos y de otros, y sobre todo como la asimila, llego a ser yo y a la primera cosa rara me falta pueblo para salir corriendo, pero no, Brigit va aceptando todo con naturalidad y sin recelo. En Brigit, encontramos una chica valiente, leal e inteligente que aunque desconoce su pasado, hará lo necesario para descubrir la verdad sobre el mismo.

Del resto de personajes no os voy a hablar, es mejor que los descubráis por vosotros mismos, pero debo decir que nunca sabía por donde iban a salir, no sabes si son buenos o no y eso aumenta la sensación de intriga en la novela.

Con las leyendas celtas como escenario de fondo, con una pluma sencilla y fácil de leer y un ritmo que no decae en ningún momento, Raquel nos trae una historia que mezcla, fantasía, intriga y romance, aunque este último no lo veremos hasta bastante avanzada la novela. Raquel ha hecho un gran trabajo con las descripciones, pues están tan bien hechas que hace que visualices el entorno que te describe y lo que está pasando como si estuvieras dentro de la escena.

La historia está narrada en primera persona por Brigit. Alternamos los momentos de suspense de la historia con diálogos con toques de humor que me han arrancado más de una sonrisa y que relajaban el ambiente tenso que se va creando lentamente. Con giros en la trama que no esperas y que hacen que necesites seguir leyendo para saber que misterios encierran Ballymote y sus habitantes.

Me ha gustado mucho la forma de Raquel de crear ese halo de suspense alrededor de Brigit y Ballymote, en muchos momentos me recordaba a la sensación que tenía cuando veía alguna película de Hitchcock, en concreto me trasladó a lo que sentí cuando vi Rebecca por primera vez, (sí, ya sé que antes de ser una peli fue un libro, de hecho un libro maravilloso de Daphne Du Maurier), si no lo habéis leído os lo recomiendo. 😉 Esa sensación de suspense continuo, que se relaja un poco en algunas escenas y que cuando menos te lo esperas, pum, te pegas el susto.

El final me ha parecido genial, de esos que cierran la historia de forma perfecta, pero que dejan la historia abierta a una continuación, la cual la autora me ha confirmado por twitter, así que esperemos que pronto tengamos más de Brigit y sobre todo de Raquel y de este maravilloso mundo que ha creado.