Reseña »Las noches en las que el cielo era de color naranja»

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 Sophie Silver es una chica normal que lleva una vida de lo más normal. Trabaja como camarera, pero su ilusión es ver publicada su primera novela. Lo más emocionante de su día a día lo protagoniza su amiga Sarah, quien acaba de recibir una beca de periodismo para marcharse a Kosovo, un país que, en pleno 2008, tiene mucho que contar.

Reese Montolivo, el chico del millón de dólares de la cadena de televisión ABC, ha visto demasiadas cosas que le impiden sentirse bien consigo mismo. Es arisco, arrogante, exigente y está desencantado del mundo. Ésa es su fachada y, aunque muchas chicas se empeñen en creer lo contrario, no hay nada más.

Cuando las cosas se tuercen para Sophie en Nueva York, decide empezar de cero y viajar hasta Kosovo con Sarah, sin imaginar todo lo que encontrará allí.

Sophie y Reese jamás sospecharon cuánto cambiarían sus vidas el día en que se encontraron por casualidad en Bryant Park. Ambos lucharán, sufrirán, reirán y tomaran las decisiones más difíciles de sus vidas. Todo por el sexo más increíble, salvaje y adictivo que hayan experimentado jamás. Todo por una historia de amor que los marcará para siempre. Todo en las noches en las que el cielo era de color naranja.

OPINIÓN PERSONAL

Descubrí a Cristina Prada, la autora de esta novela, con su anterior trabajo, la trilogía «Todas las canciones de amor que suenan en la radio», y entonces ya me conquistó su pluma. Por eso en cuanto me enteré de la publicación de su nuevo trabajo no dudé de que caería muy prontito en mis manos.

He de decir que es una novela que me ya me enamoró con su portada y su título así que decidí hincarle el diente sin pararme a leer de qué iba. Cuál fue mi sorpresa a medida que leía, que no solo era una historia romántica (esperaba que fuese más del estilo de TLCDAQSELR) sino que también es realista, muy realista, y te mete de lleno en la guerra en Kosovo.

Decir que me han enamorado los personajes es poco. Sophie, una escritora novata que decide ir a Kosovo «en busca de aventuras» sin ser consciente de la crudeza y el sufrimiento que se va a encontrar allí, una chica muy dulce que se hace querer desde el primer momento, y con una valentía increíble. Y por otro lado Reese, el chico del millón de dólares con fachada de chico malo enfadado con el mundo (motivos tiene), que piensa que en el no hay nada bueno que encontrar, pero en el fondo un corazón enorme con mucho para dar. Sin dudas dos personajes hechos el uno para el otro, pues Sophie será la única con valor y paciencia suficientes para hacer cambiar la manera en la que Reese se vea a si mismo y sea capaz de perdonarse.

No se pueden pasar por alto tampoco ninguno de los personajes secundarios. Sarah, Owen, Matt, todos esenciales en esta novela. Y Milo…qué puedo decir de Milo… No quiero hacer spoiler, así que solo puedo decir que odié un poquito cierto momento en la novela, pues para mí es otro personaje que se merece un gran final feliz.

Una gran historia de amor, quizás no en las mejores circunstancias por el panorama que les rodea. Que te hace ver la crudeza de países en los que muy poca gente se preocupa ni de que existen. Una historia que te traslada a esos lugares y que personalmente hasta me hizo ver los cielos teñidos de naranja de Kosovo. Que me a hecho reír y llorar. Una historia llena de emociones y que te hace ver la realidad, la importancia del verdadero amor. En definitiva una novela que me a enamorado y que no puedo dejar de recomendar.

Muchas gracias a Cristina Prada, que no deja de sorprenderme y enamorarme con su pluma, y a Editorial Planeta por el envio del ejemplar.

http://www.planetadelibros.com/libro-las-noches-en-las-que-el-cielo-era-de-color-naranja/218676