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Título: Heli
Director: Amat Escalante
Guión: Amat Escalante, Gabriel Reyes
Reparto: Armando Espitia, Andrea Vergara, Linda González, Juan Palacios
Duración: 105 minutos
Año: 2013
País: México, Alemania, Países Bajos, Francia
Género: Drama
Productora: Coproducción México-Francia-Alemania-Holanda
Distribuidora: Emon Films
En un remoto pueblo de México, la población sólo tiene dos medios para ganarse la vida: un empleo mal pagado en una ensambladora de automóviles o trabajar para el cártel de drogas de la región. Estela, una niña de doce años, se ha enamorado perdidamente de un joven que le propone escapar para poder casarse.
La primera escena de la película, una vez visionada entera, es más o menos la mitad. Aparecen dos muchachos secuestrados y uno de ellos es colgado en un puente. A partir de ahí comienza la historia de Heli y Estela.
Heli (Armando Espitia) es un muchacho que a pesar de su juventud está casado y tiene un bebé. Vive con su mujer (Linda González), su hermana (Andrea Vergara) y su padre. Ambos trabajan en una ensambladora de coche para mantener a la familia. Estela está estudiando, pero con apenas 12 años está perdidamente enamorada de Beto (Juan Palacios) y su amor será el desencadenante de esta historia.
¿Como una familia que está fuera de los temas de las drogas puede llegar a sufrir tanto por ello? La respuesta es un poco la película, además de las consecuencias posteriores tras ‘pagar su deuda’. La violencia está por todas partes, desde Beto, que es un cadete militar, pasando por las acciones, entrenamientos, torturas… y terminando por la tortura psicológica.
La situación de México está reflejada en esta película, no sé si exageradamente o no, porque nunca he estado allí, pero sólo tienes que ver las noticias o reportajes para ver los narcotraficantes, el número de muertes que hay, las narco-rancheras… una realidad muy distinta a la que vivimos aquí en España. No me estoy inventado nada, seguramente puedas verlo en ‘Callejeros’, ‘Conexión Samanta’ o ‘21 días’, pero para ver las consecuencias seguramente en ‘Encarcelados’ habrá un apartado para las cárceles mexicanas.
Los actores son muy jóvenes, para los 4 esta es su primera película por lo cual no podría comparar otros trabajos. Lo que sí he visto que tras esto están rodando más cosas. Por ejemplo Armando Espitia está rodando “Trece cielos”. En la cinta se nota que por el tipo de escenas y planos que hace el director, les deja mucho a su aire para que se expresen, hablen y se muevan por la escena, cosa que hacen muy bien, aunque no termina de cuajarte mucho.
El director de la cinta es Amat Escalante, ganador del premio ‘mejor director’ en Cannes 2013. Esta es su tercera película tras “Sangre” (2005) y “Los bastardos” (2008), cuya temática no difiere mucho de “Heli”, pero no están tan reconocidas como esta última.
La visión de Escalante en la película es muy singular, las escenas son muy largas, la cámara está fija en un punto y sólo ves lo que pasa por delante, apenas se mueve, un guión mínimo muy extendido y mucho letargo… es como si fueras un espectador dentro de la película pero no pudieras moverte por todo el entorno. Este tipo de películas es un arma de doble filo, te encanta y te parece fantástica la acción delante de ese punto o te resulta aburrida y bastante sosa. En mi caso fue lo segundo.
La película dura 1 hora y 45 minutos, de los cuales 1 hora y media es un punto fijo detrás de los protagonistas, delante del protagonista… pero sin seguirlo, sin mover la cámara para ver que hay más… eso a mí me desencanto mucho y si soy sincera, en un principio mi reacción fue peor de lo que estoy contando. Después tras reflexionar y dejar de lado todo ello, me doy cuenta de que si dejas de lado la técnica, la historia que te cuenta es apabullante, dramática y digna de un premio, sobre todo por el escaso presupuesto y la “denuncia” que está haciendo de la situación, por lo que podríamos decir que es una narco-película.
Se nota que el director está cómodo con la violencia. Tenemos de todo, tortura, muerte, puñetazos, amenazas… y más cosas que aunque no vemos aparecerán en la historia. Esta película puede herir la sensibilidad del espectador en ciertos momentos, pero que son una forma de retratar a las mafias de la droga.
Para concluir, por mi parte a esta película le doy un 6.5, no porque no me haya gustado, todo lo contrario veo una especie de documental que refleja una situación. Pero los planos fijos, el letargo y el mínimo guión me han dejado demasiado lejos de la historia como para cautivarme del todo.
Crítica: María José Díaz-Maroto García
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