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Ficha técnica | Título: Tom Of Finland. Director: Dome Karukoski. Guión: Aleksi Bardy. Reparto: Pekka Strang, Lauri Tilkanen, Jessica Grabowsky, Taisto Oksanen, Niklas Hogner, Jakob Oftebro, Kari Hietalahti, Werner Daehn. Género: Biografía, Drama. Duración: 116 minutos. Año: 2017. País: Finlandia. Fotografía: Lasse Frank Johannessen. Música: Lasse Enersen, Hildur Gudnadóttir. Productora: Helsinki-filmi, Anagram Väst, Fridthjof Film, Neutrinos Pictures, Film Väst. Distribuidora: Festival Films.
Touko Laaksonen, oficial condecorado que vuelve a casa después de una traumática experiencia en la Segunda Guerra Mundial, se encuentra en un Helsinki que persigue duramente a los homosexuales. De esta forma encuentra refugio en sus dibujos homoeróticos de hombres musculosos, sin inhibiciones, firmando como Tom de Finlandia. Su obra acabó convirtiéndose en el emblema de una generación de hombres y avivó las llamas de una revolución gay.
Cuando, además de no tener conocimiento previo, no perteneces al colectivo en concreto que representa la película, te ves en una tesitura incómoda por no querer meter la pata en nada de lo manifestado. Así que me disculpo de antemano por no sumergirme en algunos detalles y debates con tal de evitar errores por mi parte.
Película finesa, centrada en contarnos la historia de Tom of Finland. Me parece prioritario remarcar lo necesarios que son los biopics (a poder ser ejecutados con gracia, como es el caso) por arrojar luz sobre personas/personajes de cierta relevancia o simbolismo y que quizá no recibieron el reconocimiento en su momento. Pues os adelanto ya que, para mí, lo más importante de una película así, es que exista.
Es el primer trabajo que veo de todos los involucrados en el film, así que no los puedo valorar enfocándome en sus trayectorias. Pero sí he notado una recia sintonía entre dirección (Dome Karukoski), montaje (Harri Ylönen) y guión (Aleksi Bardy). Desde mi perspectiva habría recortado algunos minutos de duración para no ver resentida la historia, pero más allá de esto todo circula en un mismo sentido para dar una forma clara al largometraje.
Y cuando se trabaja en compenetración, y el reparto es bueno e involucrado, todo funciona casi con seguridad. Y es que el protagonismo de Pekka Strang como Touko o “Tom” es esencial en el éxito del proyecto; resulta tan natural y expresivo, se le ve muy metido en el papel. Muy bien acompañado por secundarios como Lauri Tilkanen (Nipa) o Jessica Grabowsky (Kaija), es bonito ver dicha química entre ellos mismos y por supuesto el director. Creo que la labor de este último ha de quedar recalcada ya que afronta un biopic que es un verdadero reto con total mano firme y apostando seriamente por su visión.
También me parece importante destacar en este caso, aunque otras veces no lo haga, el aporte al engranaje de piezas como la banda sonora (Lasse Enersen y Hildur Guðnadóttir) y el diseño de vestuario (Anna Vilppunen) y esto lo entenderéis si vais a ver la película.
Sin dejar de lado la perfecta fotografía y escenarios, aunque supongo que grabar en Finlandia ya te da ventajas, ¿o no os parece que tiene sitios preciosos? En realidad se grabó en Suecia por lo que sé, así que no me hagáis mucho caso.
Pero no es una película para todos los públicos. Más allá del contenido, que me parece lo de menos, me refiero a tipo de público. No es palomitera ni comercial, no deja de ser cine de autor y además tiene un inicio realmente difícil. O exigente, si preferís. Por eso este tipo de cine nos llega poco en España. No se apoya en cantidades suficientes para cambiar las cosas el cine extranjero o los relatos biográficos de este estilo. Y son necesarios. ¿Cuántos de nosotros escucharíamos o sabríamos alguna vez quién es Tom of Finland si no fuera por esta película? Y después de ella, ¿cuánta gente todavía no conocerá la vida de tal artista y lo que supuso su figura?.
Soy el primero que entiende que el dinero nos hace priorizar, y yo también pago antes por ver la nueva de Marvel o la nueva de Dwayne Johnson y no vamos cada semana a ver una peli finesa, italiana, china o brasileña. Pero hay que ser consecuentes y pararnos a observar lo que pasa por nuestro lado de vez en cuando. Id a verla.
Crítica: Dani Pereira
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