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Título: Cómo entrenar a tu dragón 2 (How to Train Your Dragon 2)
Dirección: Dean DeBlois
Guión: Dean DeBlois
Reparto: Jay Baruchel, Cate Blanchett,Gerard Butler, Craig Ferguson, America Ferrera, Jonah Hill
Duración: 103 minutos
Año: 2014
País: EE.UU.
Música: John Powell
Fotografía: Animación
Género: Animación, Aventuras, Fantástico
Productora: DreamWorks Animation / DreamWorks SKG / Mad Hatter Entertainment
Distribuidora: 20th Century Fox España
¿Os acordáis de “Los Croods” de Chris Sanders?, en ella teníamos un padre muy tozudo que se encerraba en su caverna y no aceptaba ideas ni tan siquiera de su familia pero que acabo enfrentándose a nuevos desafíos. Sin lugar a dudas no hay personaje más autobiográfico de DreamWorks como el que acabo de describir. En sus inicios, DreamWorks como neandertal sin ideas tenía un empecinamiento en copiar al rival, en ese momento Pixar era el contrincante a batir y si estrenaban una película de hormigas, ellos contraatacaban con “Antz” (1998), tocaba ratones pues “RatonPolis” (2006) y así sucesivamente. Las comparaciones eran odiosas pero en el caso de “El Espantatiburones” y “Buscando a Nemo” en 2004 supuso un toque de atención más que evidente.
Es entonces cuando se siguió por otra senda, se apostó mejor por ideas propias con mayor o menor acierto, del mismo modo que “Los Croods” aprendían a crear fuego nos encontrábamos con DreamWorks en la misma tesitura, chasqueando piedras tal cavernícola en busca de esa chispa que les salvaguardara de una filmografía bastante fría. Una idea original que avivase las llamas, una serie de gags graciosos aderezados con momentos musicales para mantener las brasas y salvar la hoguera de la mejor forma posible eran esta vez sus mejores armas. Comenzaban a surgir propuestas más frescas pero no eran suficientes para competir con Pixar que por aquel entonces se paso a la electricidad y se les encendía la bombilla de su logo con mayor asiduidad.
No fue hasta 2010 con “Como entrenar a tu dragón” –del ya mencionado Chris Sanders, un veterano en la animación tradicional de los 90–, llegara la que es considerada la mejor película del estudio hasta la fecha, basada en los libros de la británica Cressida Cowell, aunque acabo pareciéndose más a una mezcla de “Lilo & Stitch” y “Harry Potter y el cáliz del fuego”. Tras años de deambular por el desierto, habían conseguido una película redonda con una idea original con un final no muy “Happy End”, por fin encontraron su caverna particular donde salvaguardarse.
Esta vez en “Como entrenar a tu dragón 2” han pasado 5 años desde que el joven Hipo demostrara que se puede convivir con los dragones perfectamente, las rencillas paterno-filiales son cosa del pasado y la aldea vikinga no sufre peligro alguno. No es requisito indispensable haber visto la primera para entender esta secuela, sino todo lo contrario, son películas completamente distintas con las que se puede disfrutar de igual manera.
Precisamente nada más comenzar veremos a los dragones haciendo vida normal en el poblado, veremos cómo participan en una especie de quidditch –Harry Potter está muy presente en esta saga– mientras que Hipo ha tenido tiempo suficiente para practicar el tan polémico wingfly gracias a su inefable dragón Desdentado. Ante una situación tan idílica no sería de extrañar pensar que hay poco más que contar con respecto a estos vikingos, pero estábamos muy equivocados.
La curiosidad de nuestro protagonista por conocer a los dragones en la primera parte le llevara en esta ocasión a aventurarse en el extenso mundo que le aguarda en el horizonte. Este interés por lo desconocido y surcar las nubes nos llevara a profundizar en su familia a través de un invitado enigmático así como conocer nuevas aldeas con otro tipo de intenciones con respecto a los dragones. Mientras tanto Estoico, el líder vikingo y padre de Hipo, asume en esta ocasión un papel de mayor enjundia, veremos su lado más humano y junto a pequeñas miradas a su pasado comprenderemos mejor como se forjo su forma de ser. Un nuevo villano hará su aparición como en toda aventura que se precie no debe faltar en esta epopeya que tendrá otro concepto diferente de lo que es confraternizar con dragones.
Es posible que el guión no de mucho juego en cuanto a sorpresas, igual pecan de repetir el esquema de la original pero dándole un giro nuevo en la relación entre dragones y vikingos pero esto no supone ningún impedimento para zambullirse en su historia. En cambio, si hay algo que no podemos reprochar a esta secuela son las escenas a cielo abierto al más puro estilo “Avatar” de James Cameron, ahora los vikingos son jinetes y su director Dean DeBlois nos deleita con esos planos aéreos que no dejaran extasiados con ganas de mas.
Tanto Hipo como sus compañeros tendrán que asumir responsabilidades, verán con sus propios ojos que hay muchas hostilidades a las que enfrentarse con lo que va en consonancia con la transformación más adulta que sufre la saga. Nuestros protagonistas han dado el salto de niños a jóvenes muy rápido con lo que eso conlleva, la épica con toques infantiles de la primera dan lugar a una película más juvenil y aventurera en esta secuela. Se sacrifican esos aspectos dirigido a los pequeños de la casa para apostar mas por la épica melodramática, no es que sea malo, pero esas pinceladas de comedia desenfadada han desaparecido irremediablemente en esta nueva entrega.
DreamWorks con esta película demuestra que la prehistoria carente de ideas ha quedado apartada y los infructuosos intentos por crear fuego han quedado relegados al pasado. Como bien nos recuerda el joven Hipo, ellos tienen dragones escupe fuegos mientras que este año a Pixar se les ha fundido los plomos irremediablemente. Aún no han alcanzado esa brillantez de pulsar el interruptor y que se encienda la bombilla pero ante la oscuridad que se cierne en Pixar prefiero la hoguera que el equipo de Chris Sanders — Dean DeBlois han iniciado, la cual no deja ser igualmente acogedora para contar historias en estas noches veraniegas que nos acompañan.
Lo mejor: Las escenas épicas de batalla alcanzan una complejidad inusitada. La animación ha mejorado considerablemente. Lo peor: Los momentos desenfadados y cómicos se han diluido en esta entrega apostando mas por la aventura.
Crítica: @ivanheral
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