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Título: Mud
Director: Jeff Nichols
Guión: Jeff Nichols
Reparto: Matthew McConaughey, Tye Sheridan, Jacob Lofland,
Reese Witherspoon, Michael Shannon, Sam Shepard,
Sarah Paulson, Ray McKinnon
Año: 2013
Duración: 130 minutos
País: EE.UU.
Género: Drama
Productora: Lionsgate Films / Everest Entretaiment
Distribuidora: Vértigo
La mayoría de historias y personajes son universales. En ocasiones, el valor de una buena película radica simplemente en el lugar donde se ubica. Aunque solemos asociar los EE.UU. con grandes ciudades, rascacielos y glamour, también sabemos que existen sus campos, sus ríos y sus paletos sureños. Quienes encuentren fascinante los relatos con ríos de barro, camionetas oxidadas y entrañables fugitivos, deberían pasarse a conocer a “Mud”.
El joven director Jeff Nichols, aparecido en el panorama cinematográfico hace dos años conla inquietante “Take Shelter”. Ahora nos vuelve a trasportar a lo más profundo de la América rural sureña, el paso del río Mississippi por su Arkansas natal. En esta ocasión nos encontramos con una narración más tradicional, casi una revisión del clásico de Mark Twain, Tom Sawyer. En esta ocasión, los jóvenes aventureros que navegan con su barca por el río en pleno siglo XXI son Ellis y Nickbone. Y, el simpático pirata al que ayudarán a recuperar a su princesa es Mud (interpretado por Matthew McConaughey). Cambian los tiempos pero no la historia ni el mensaje. Las historias y problemas de la adolescencia, la amistad o la familia siguen siendo las mismas, siglo tras siglo.
Todos los elementos de la película, sin ser una obra maestra, consiguen conjugarse para lograr una peli seria y efectiva… y sobre todo, sencilla. Los problemas de un chico de campo y su relación con su reflejo adulto, un enigmático fugitivo de la justicia que busca la felicidad a través de un amor imposible. Una banda de pistoleros como las de antaño complicará la vida de los habitantes del río.
El peso del relato cae sobre el joven protagonista adolescente, interpretado de forma solvente por Tye Sheridan (uno de los hijos en esa belleza extraña que fue “El árbol de la Vida”). Vemos el mundo a través de sus ojos, los problemas de sus padres, los primeros amores y el miedo y fascinación por transigir las normas y ayudar al fugitivo Mud. No obstante, la estrella del show es McConaughey, actor que, como el buen vino, gana con el tiempo y que hará las delicias del público comiendo judías de lata sin cocinar. Sucio, tatuado, desgarbado y sin embargo encantador y carismático, por momentos nos hace olvidar su imagen de chico guapo de Hollywood y se mimetiza con el ambiente rustico de la rivera. Una creíble, Reese Witherspoon, mitad pueblerina-mitad feme fatale y el eterno Sam Shepard completan el reparto junto con una pequeña aportación de Michael Shannon, actor fetiche de Nichols y sin duda, el malvado de moda en Hollywood por sus papeles en “Boardwalk Empire” y “El hombre de Acero”.
La naturaleza, el paisaje rupestre y sobre todo, el Río, son los otros protagonistas del film. Hermosas imágenes que nos trasmiten la autenticidad de la América profunda, sin juicios ni paños calientes. Se tocan de refilón problemas sociales, como en la forma de vida tradicional de los habitantes del río, unidos con los conflictos del amor y la adolescencia. Por cosas así la película no es más ambiciosa a la hora de afrontar y resolver los conflictos que plantea (la ruptura de la familia, la fragilidad del amor) y tal vez tenga una duración excesiva, con muchas sub-tramas que ralentizan la narración principal.
En definitiva, una película solida, solvente y sincera. Sin grandes alardes, no pretende ir más allá de su objetivo, hablarnos de un lugar y unos personajes sencillos pero apasionantes. Una gran Matthew McConaughey, en un papel para lucirse y en definitiva, una buena forma de conocer la otra América.
Redactado por: Daniel Álvarez González
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