Reseña: Adriana Rubens – La manzana de Eva

Adán y Eva son dos amigos que dirigen Pecado Original, una singular peluquería situada en el barrio de Chueca, en Madrid, apoyados económicamente por Laura, la prima de Eva.

Para cubrir la baja de uno de sus peluqueros, Eva decide contratar a Max, un atractivo italiano que se presenta en la peluquería en busca de trabajo, sin saber que a quien está contratando en realidad es a Massimo Valenti, propietario de un imperio de peluquerías en Italia, y dueño también de la peluquería que tienen enfrente y que es su competidora más directa.

Max se infiltra en Pecado Original dispuesto a averiguar el secreto de su éxito, pero todo se vuelve del revés cuando la atracción que siente por la propietaria se convierte en algo más.

¿Podrá hacer entender a Eva que lo que empezó como una mentira se ha convertido en un sentimiento muy real?

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¡Hola!

Pues hoy os voy a hablaros de La manzana de Eva de Adriana Rubens. Debo decir que de los tres libros que tiene publicados la autora, este es el segundo que leo, el primero fue Detrás de la máscara y, aunque es de género histórico, y por lo tanto muy diferente a este, también me encantó, así que esta autora está pegando fuerte entre mis autoras españolas favoritas.

En este libro conoceremos Max, un italiano cañon. Max es dueño de una importante cadena de peluquerías a nivel internacional, está muy implicado en el trabajo desde que perdió a sus padres siendo muy joven, y la peluquería familiar fue el medio que encontró para sacar adelante a sus hermanos, por lo que el negocio es muy importante para él. Su cadena de peluquerías es la número uno en todos sitios, en todos sitios excepto en Chueca (Madrid), donde otra peluquería, familiar y más pequeña, les hace una dura competencia. Para averiguar el secreto del éxito de Pecado Original, ese es el nombre de la peluquería, Max se presentará como cliente, para posteriormente terminar trabajando allí e intentar averiguar todos sus secretos.

Al llegar conocerá a Eva, una chica muy dulce, alegre y simpática, pero que a la vez, esconde un fuerte carácter. Eva es una de las dueñas de Pecado Original junto con Adán, su mejor amigo desde la infancia y Laura su prima y socia capitalista. Está desilusionada de los hombres, a los que no quiere ver ni en pintura, pero al aparecer Max la atracción será instantánea. La atracción sexual entre ambos personajes es intensa desde el minuto cero, aunque la resistencia de Eva a iniciar una relación hará que Max tenga que emplearse a fondo para conseguir su confianza.

La historia es un poco cliché, desde el comienzo ya ves por donde van a ir ciertos derroteros, pero aún así gusta. La autora hace que te sientas parte de la historia, que te identifiques con sus personajes y la vivas desde dentro. Las referencias, tanto históricas como cinematográficas, las conversaciones en la peluquería, y ciertas situaciones dan un toque entretenido y de realismo a la historia. Es un libro muy divertido, con un lenguaje sencillo y cercano, de lectura ágil y fluida, con personajes muy diversos con los que te podrás identificar y te divertirás un montón. Con escenas eróticas de alto voltaje que harán que te suba la temperatura, y es que Max y Eva son puro fuego. Y un protagonista masculino al que empezaras odiando (al menos yo lo hice), pero al que no podrás evitar amar al final. 

Los secundarios son muy importantes en la trama, pues son parte de la pequeña familia de Eva, y en ciertos momentos se convierten en protagonistas también en la historia. Caben destacar sobre todo la misteriosa Laura de la que en verdad me he quedado con ansias de conocer a su personaje, y Adán, que será el protagonista del desenlace de la bilogía y del que me muero por conocer su historia. Terminaras el libro deseando tener La tentación de Adán en tus manos para saber que pasa con las vidas de todos ellos. 

Quizá la pega que le pondría es que el final se resuelve muy rápido, me hubiese gustado un  poco más lento su desarrollo, pero en fin, en general me ha encantado y  por todo eso;